Frío de Noviembre.

Pues ya se ha cumplido. Desde hace apenas 3 horas se ha cumplido mi primer mes oficial aquí. Mi primer mes lejos de casa, de mi familia y de mis amigos.

Haciendo balanza ha sido un mes extraño: me he tenido que adaptar a marchas forzadas a esta ciudad que no da un respiro a nadie. He pasado buenos y malos momentos, unos más divertidos y felices y otros mas groseros. Mucha añoranza también en los momentos de estar solo. De acordarte de tus padres y de tu familia en general. He recibido muchas llamadas, quizás no tantas como me hubieran gustado, pero yo he llamado muy poco, entre otras cosas, porque me da una verguenza horrible. Sí, soy un poco imbecil. Lo sé. Hay gente que está ahí, que se preocupa, que los notas, los sientes a cientos de kilómetros. Desde sus bocas siempre hay aliento y comida al pobre y empujón definitivo para afrontar los problemas de uno. Hay otras llamadas que no recibes, que te gustarían, pero que no vienen al caso. Seguramente haya bastantes cosas que no haya hecho bien, pero tampoco creo que sea el mano derecha de Lucifer. Todo el mundo tiene un "mejor amigo" cómplice de hechos y hombro donde te lloran en otros. Yo no lo tengo figurado en una persona. Son varias, muy buenas y ninguna de está aquí. No soy una persona que se abra del todo facilmente, ni que cuente todas sus cosas a esas personas, a sus "mejores amigos". Por eso, la figura del susodicho, no ha abundado en estos 24 años en solo una persona, sino que ha ido creciendo, disminuyendo o mutando con el paso del tiempo.
Tampoco me quiero quejar de esto, pues gracias a muchas cosas, tengo a mi lado a una persona maravillosa, que me hace reír y disfrutar y sentirme vivo cuando más lo necesito. Y ahora, en este momento, en este punto, ella es fundamental para mí. Tanto que sin ella, sé que no estaría aquí. Lo mejor de todo, es tenerla día a día a mi lado y a vosotros, aunque estéis lejos.[...]
Terminado este momento filosófico/sentimental y algo quejica, os contaré que ya he tenido mi primera salida oficial con la gente del máster. Fue el martes, estuvimos en la Mae West, en los monólogos. A mi particularmente, no me gusta mucho la discoteca. Ni el ambiente ni la música, pero he de reconocer que está cuidada al milímetro. Impresiona la primera vez que entras los palcos de la 2º planta y la zona VIP. Una gran superficie de ocio acorde con lo que se mueve en esta ciudad. Valoro la salida como muy buena. Muchas risas, mucha pasta gastada (que ahora duele bastante jeje), muy buen rollo. Como conocer otras cosas y no morir en el intento. Está bien.[...]
Las clases siguen su curso entre física newtoniana y matemáticas realmente avanzadas, ambos temas de los cuáles, prefiero no hablar en este blog, por respeto a nuestras capacidades de abstracción y análisis tanto del lector como del escritor. Mejor dejarlo estar. Creerme.
Hoy ha sido la presentación del curso. Había un acto a las 12 de la mañana y he decidido no ir. Anoche me acosté tarde (hoy también lo es) y si puedo no "madrugar" entre comillas, casi que mejor. Nos habían vendido la moto de que por unas cuantas cervezas, teníamos que estar casi hora y media de conferencia. Pensando que por 1,5€ en el chino te venden un litro....[...]
Bajo mis pies, un folleto de "ahora Madrid". Ahora esta ciudad. Con su frío glacial, su escarcha matutina. Gente gritando a las 4 de la mañana. Vagabundos que pasan realmente frío. Señoras acomodadas en trajes de bisón. Semáforos que iluminan el trasiego en plaza nueva y la ladera del darro agrietándote del frío los huesos. Carteles a medio rasgar en las farolas, calles estrechas de barrios pintados de cal en antaño. Avenidas abiertas en canal, con maquinaria pesada investigando en sus entrañas. Personas. Gente. Frío.Bares repletos de humo, otros vacíos. Tapas que son más colesterol que comida, cafeterías de facultades con cuadros de orlas en sus paredes. Gente que va, gente que viene. Pistas deportivas. Una persona corre. Vaho. Un cigarro. Jorge, pásame el mechero. Mano congelada. Noche que cae antes de lo previsto. Neblina gélida. - "joder, parece que estamos en Alaska". Y ahora calor. Una mesa de camilla. Humo. Tabaco. Luz artificial. Calefacción. Brasero y mesa camilla. Cristales congelados. Cualquier cosa en la TV. Escribir y dejar de leer. Volverte adicto casi a cualquier cosa. Un disco de Wu-tang clan.
Vida.