lunes, 16 de febrero de 2015

Odiar(me) Odiar(te)

Me gustaría poder odiarme, pero no puedo. Siempre acabo cayendo en las trivialidades y en los egos del día a día. Desearía odiarme, sentir la imprudencia de mis actos, sufrir las consecuencias, cumplir condena por mis estupideces. Me encantaría golpear al tipo del espejo, al mentiroso e imprudente de ojos miel que se despierta a la misma hora que yo.
Pero no puedo.
Me gustaría poder odiarte. Desearía poder decirte adiós, despedirte con lágrimas en un aeropuerto o en una estación lloviendo, sabiendo que te vas para no volver. Me gustaría no tener tu recuerdo totalmente impregnado a mi piel, a mis sentidos, a mis vida. Firmaría por tener una vida placentera, alejado del deseo que me producen tus curvas, de poder decirte que te equivocas cuando me dices eso de "Sé que me quieres".
Pero no puedo.
Y me convierto en un cobarde, en un enfermizo que arrojaría toda su vida por la borda por 5 minutos más. Sé que hay cosas inexplicables en esta vida, y la mía es esta. No lo puedo evitar, siempre vuelvo al punto de partida y en él siempre estás tú. Ahí, esperándome, con tu sonrisa y esos ojos que descubrí hace ya algunos años en una noche cualquiera.
Cuántas veces nos hemos inventado caminos, carreteras hacia ningún sitio, atajos para no encontrarnos. Cuántas veces en mi cabeza y en mis palabras te negué, cuántos finales hemos creado, a cada encuentro, a cada frase. Siempre cerramos la puerta, pero siempre acaba abriéndose y yo ya no sé que hacer.
"Desearía odiarte" me dices, "pero no puedo".
Pues lo mismo me pasa a mí: desearía odiarte, pero te quiero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario